Nuestra dieta debe ser siempre el núcleo de cualquier régimen de fitness, y aunque existe una gran cantidad de información sobre cómo el control del peso y la alimentación están interrelacionados, ¡es importante recordar que la comida debe estar también llena de sabor!

Después de todo, nuestros cuerpos y mentes están interconectados, y asegurarte de que cualquier alimento que consumes es delicioso además de nutritivo es fundamental para garantizar que no caes en ningún hábito alimenticio poco saludable.

Esta es la razón por la cual es una buena idea planear tu dieta cuidadosamente para asegurar que satisface tus requisitos caloríficos y también para disfrutar de algo verdaderamente gratificante al final de una exhaustiva sesión de entrenamiento.

Aunque existe la idea equivocada común de que sólo se puede conseguir un cuerpo musculoso dejando de lado los alimentos sabrosos, está claro que sólo comiendo un montón de carbohidratos con un bajo índice glucémico seremos capaces de realizar los entrenamientos más duros.

El individuo promedio necesitará comúnmente 2.000 calorías al día para desarrollar su actividad habitual, pero para una actividad física más intensa necesitaremos mucho más combustible. Hay muchos factores que pueden influir en la cantidad de calorías que necesitamos ingerir, entre los cuales podemos destacar el tamaño corporal, el género y el nivel de actividad.

Pero muchos expertos están de acuerdo en que necesitamos aprender a no obsesionarnos demasiado en contar calorías cuando llegamos al gimnasio. En lugar de eso, debemos centrarnos en no sobrecargarnos y en darnos el tiempo necesario para relajarnos y recuperarnos, formando ésto parte de nuestro régimen de fitness.

La idea de ponerte y mantenerte en forma es divertirte mientras practicas ejercicio y lo más probable es que pierdas el interés sin una recompensa ocasional. Así que ya sea dándote el placer con una nutritiva comida china entregada por un servicio de reparto a domicilio de la talla de Deliveroo después de una buena sesión de entrenamiento, o incluso preparándote tú mismo un ultra-sano batido repleto de frutas frescas y bayas, todo ello forma parte del entrenamiento corporal.

Por encima de todo, se trata de asegurar que tu dieta de entrenamiento sea lo suficientemente variada para que incluya todos los nutrientes necesarios para dar energía a tu cuerpo durante la intensa actividad física.

Sólo consumiendo un montón de fruta fresca, verduras y otros alimentos sin procesar seremos capaces de llegar hasta el final. Y lo mejor es que, en lugar de los insípidos carbohidratos perjudiciales como el pan blanco, ¡a menudo se da el caso de que los alimentos más saludables son también los más sabrosos!

Artículo por SuperSerp