Por Andy Morgan

Paciencia. ¿Cuándo esperar y cuando hacer un cambio? Cuando uno es entrenador, esta es la parte más difícil del trabajo, ya que todo el mundo quiere resultados rápidos. Pero aunque haya presión por hacer cambios, no podemos ceder. Hay que seguir siendo objetivo y elegir el momento adecuado. Por eso es que pagan los clientes.



La paciencia para un kendoka: Esperar el momento perfecto para golpear. Foto por George McCall. kenshi247.net

La falta de paciencia lleva a decisiones apresuradas. Si se les deja solos, muchos harán cosas estúpidas, como meter un par de ayunos de 24 horas, añadir algo de «acondicionamiento metabólico», más días de entrenamiento con pesas, o usar el «solo Paleo» para los carbos. La lista es larga.

La paciencia es tu amiga, a menos que exista una fecha límite para una competición. Las decisiones apresuradas pueden costarte parte de la fuerza y masa muscular que tanto te costó ganar, como mínimo.

Sobre la paciencia, Martin Berkhan escribió (refiriéndose a la dieta leangains, consistente básicamente en ayunos de 16 horas):

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«Adelgazar tanto fue la dieta más fácil que he experimentado jamás. Solo fue una prueba en cuanto a paciencia. Pero incluso aunque la dieta fue fácil, anhelaba terminarla para poder probar otra cosa distinta, cualquiera que fuese. Fue un juego de esperar, no una lucha contra el hambre. Muchos clientes me han dicho lo mismo. Y si no me lo dicen al principio, lo noto cuando estoy hablando acerca de qué hacer después de la dieta.

Desde luego, tengo los pensamientos neuróticos habituales de vez en cuando. Normalmente hacia el final. La mayoría los tienen. Me pregunto si de verdad sigo perdiendo grasa o me he estancado. La retención de agua tiende a hacerte pensar y en ocasiones ves que el peso no se está moviendo durante 10-14 días. Y es en ese punto cuando es más probable hacer algo estúpido. Es en ese momento cuando se vuelve difícil resistir las ansias de recortar más las calorías o añadir cardio adicional. La mayoría de la gente lo hace, incluso los entrenadores, y se vuelve en tu contra.

Pierdes fuerza o el hambre se vuelve insoportable, o cualquier otra cosa sucede y se rompe la dieta, te atiborras de comida uno o dos días, intentas volver a donde estabas haciendo otra cosa estúpida y quedas atrapado. O abandonas. Es como un efecto domino, todas las fichas caen por un pequeño soplo de viento que tiró la primera pieza. Es mucho más fácil cuando tienes a alguien que te está supervisando y dando órdenes, por supuesto» (Tomado de este post).

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Historia de Andrew (uno de mis clientes)

Cuando terminó el periodo de asesoramiento y estábamos discutiendo qué hacer a continuación, tuvimos una interesante conversación acerca de la paciencia. Las palabras de Andrew me impactaron y le pregunté si podría compartir su e-mail. Diciéndome que él mismo había recibido mucha ayuda de los comentarios de otros, accedió amablemente. El énfasis en negrita lo añadí yo.

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Peso: De 77,45 kg a 75,59 kg. Porcentaje de grasa corporal: de 12,7 a 7,9% (medido con escáner DEXA)

«Quería enviarte una nota rápida de apreciación y que supieras cuánto me has ayudado. Me consideraba una persona bastante racional y metódica. Había leído todo los artículos de Leangains y Bodyrecomposition.com, y así es más o menos como encontré tu página. Puse en práctica toda esa información durante la mayor parte del 2011, y vi algunos resultados. Pero alrededor de Agosto del último año, mi fuerza se hundió completamente. Estaba subiendo y bajando mucho en los días de descanso frente a los días de entrenamiento, y aplicaba todas las reglas sin ningún sentido porque no tenía experiencia. Además, no llevaba un registro de los números respecto a lo que levantaba o las medidas semanales del cuerpo.

Tomarme las medidas solo una vez por semana ha sido uno de los cambios de mentalidad mayores para mí. Por fin puedo relajarme y dejar que las cosas sucedan, y, lo que es más importante, aprendí tu sistema para realizar decisiones objetivas acerca de mi propio progreso. Las reglas para contar también me ayudaron a relajarme en mi comportamiento obsesivo-compulsivo. Me he pasado bebiendo o comiendo comida basura ocasional casi cada fin de semana, y todavía he seguido bajando con el plan. Y eso me ha abierto los ojos. Además de poder darme lujos, me he sentido mucho más cómodo al solo echar un vistazo a la comida para saber en líneas generales lo que estoy comiendo. ¡Se acabaron los temores en vacaciones!

Por los escáners DEXA que me he hecho, he bajado de 12,7% a 7,9% entre el 18 de Julio y el 26 de Octubre. Al mismo tiempo, he ganado 1,95 kg de masa magra. Me haré eco de lo que otras personas te han escrito: la gente necesita relajarse y dejar que las cosas sucedan. La gente, especialmente la de tiempos modernos, es increíblemente impaciente. Yo todavía lo soy y lucho con ello, pero si se mantienen en el plan, como se suele decir, llegarán allí. Tuve un punto de estancamiento de casi seis semanas, y luego, al llegar a cierta semana, boom, bajé más de 2 kg y me vi marcado de repente. ¡Fue una locura!

¡Sigue esparciendo la verdad! Estadísticas completas aquí«

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Puede ser difícil saber cuándo realizar un cambio, por supuesto. No es tan fácil saber si el estancamiento es natural o se necesita ajustar algo para seguir avanzando. Hay muchísimas variables que no encajan en un post. Para el preparador, la labor es ser capaz de ver el cuadro completo y ver una decisión, ya que la gente confía en tu capacidad de ver los patrones. Pero si eres tú quien toma sus propias decisiones, todo lo que puedo decirte es que, solo porque tu método para registrar el progreso no muestre avances, eso no quiere decir que no se estén produciendo.

Conforme gano experiencia espero compartir esas lecciones aprendidas de manera útil. Pero por hoy, añade la «paciencia» a las herramientas en tu dieta.

Traducido de un post de Andy Morgan «Patience: A Key Tool for Diet Success» de Rippedbody.com.