Por Tom Venuto

¿Eres ectomorfo, endomorfo o mesomorfo? para maximizar los resultados ya sea que quieras perder grasa o ganar músculo, ayuda saber que tipo de cuerpo tienes y ajustar tu plan de acuerdo a él. Pero una gran pregunta que casi nadie ha contestado nunca es: ¿cambia el tipo de cuerpo con el tiempo?.

Si es así, entonces ¿qué? ¿tienes que volver a cambiar toda tu nutrición y entrenamiento? y si tu tipo somático no cambia ¿quiere eso decir que vas a ser endomorfo durante el resto de tu vida, condenado por tu genética?

El tipo somático

El tipo somático es una escala de 3 partes con 7 puntuaciones para medir el tipo de cuerpo, desarrollada por un tipo llamado Sheldon en 1940 o así. Los ectomorfos son los tipos de cuerpo lineal y delgado, los mesomorfos son gente de naturaleza musculosa (si, ¡esos que odiamos!) y los endomorfos son aquellos que tienen formas corporales redondas y la tendencia genética a acumular más grasa corporal.

Generalmente, tenemos una combinación de tipo corporal, y es por eso que se puntúa con 3 números (pensemos a Arnold Schwarzenneger en su apogeo como culturista como un mesomorfo puro con la puntuación más alta de 7).

Cambios en el tipo somático

La pregunta es, ¿cambia el tipo somático? es una pregunta muy interesante que ha sido formulada y debatida antes por la gente de a pie (a menudo los entusiastas del culturismo y el fitness) y por los científicos.

Dos de esos científicos eran JE Lindsay Cartery un profesor de educación física de la universidad del estado de San Diego y Barbara Heath, una antropóloga de la universidad de Pennsylvania.

Inicialmente había mucho debate y antagonismo provocado por el clásico sistema de Sheldon de clasificar los cuerpos humanos (somatotipo), ya que inicialmente Sheldon era muy rígido en su insistencia de que el tipo de cuerpo era permanente y no cambiaba.

Sin embargo Heath y Carter afirmaron que estaba claro que el cuerpo cambia debido al crecimiento normal, envejecimiento, entrenamiento físico y privación dietética (citaron el estudio de hambre de Minnesota donde los sujetos comenzaron con un aspecto mesomórfico y terminaron pareciendo víctimas de un campo de concentración ectomórficas literalmente). Estos científicos querían encargarse de las fallas del método de somatitpos de Sheldon y una de ellas era el hecho que el sistema no se acomodaba a cambios en el físico como resultado del entrenamiento y la nutrición.

En su voluminoso libro de texto de 1990 sobre el tema, Heath y Carter definen el somatotipo (tipo somático) como:

«Una descripción cuantitativa de la presente forma y composición del cuerpo humano. Se expresa con un ratio de 3 números, cada uno de los cuales representa 3 componentes del físico: (1) endomorfidad, (2) mesomorfidad y (3) ectomorfidad. El somatotipo puede utilizarse para registrar cambios en el físico y estimar a groso modo diferencias biológicas y similitudes entre seres humanos. Este método de somatotipia es sensible a cambios en el físico a través del tiempo y es utilizado para medir ambos sexos a todas las edades».

Si miramos a alguien como John Barlett, al verle hoy y preguntarte por su tipo somático dirías «¡MESOMORFO desde luego!». Pero si observas la foto de antes y se te pregunta «¿cuál es el tipo somático de este?» dirías «¡Endomorfo desde luego!»

Claramente, John ganó un montón de músculo y perdió un montón de grasa y su aspecto hoy día es totalmente diferente. Basados en la apariencia exterior actual, su tipo corporal cambió. Pero…¿quiere decir eso que realmente cambió o que él consiguió sobreponerse a un tipo inherentemente endomorfo y consiguió ser quien es?

O incluso yendo aún más lejos ¿y si fué siempre mesomorfo y lo que sucede es que se dejó ir por un tiempo antes de volver a su tipo mesomorfo normal?

Son preguntas interesantes. El método Heath-Carter simplemente incluye la composición corporal como parte de una escala de valoración del tipo de cuerpo de la persona y dice que puedes evaluar a alguien basándote en su apariencia actual. Eso incluye la estructura osea (que cambia poco o nada durante la época adulta) Y la composición corporal (que sí cambia a lo largo de la vida). Se podría decir por tanto que John era Endomorfo y ahora es Mesomorfo. Esa sería su clasificación predominante actual.

El tipo somático inherente

Sin embargo, al mismo tiempo, se podría decir que una persona tiene un tipo corporal inherente o punto corporal de partida, un físico al que se inclinará en ausencia de circunstancias o esfuerzos dedicados a cambiarlo.

Este tema del tipo corporal cambiante frente al inherente (o tipo «permanente») ya lo traté en mi libro «Burn the Fat, Feed The Muscle» (quema la grasa, alimenta el músculo). Explique que el verdadero tipo corporal es aquel hacia el que te inclinas de manera natural cuando no estás en un estado de alto entrenamiento. Es tu tendencia inherente. A ese respecto se podría decir que el somatotipo no cambia, mientras que la composición corporal si lo hace.

Hay 3 maneras adicionales de conocer cuál es nuestro tipo de cuerpo inherente, que tienen en cuenta cambios en el físico debidos al entrenamiento y la nutrición:

  • 1. Cual era el aspecto antes de empezar a entrenar.
  • 2. Respuesta al entrenamiento y nutrición (facilidad para ganar músculo o perder grasa)
  • 3. Respuesta al desentrenamiento (cómo de rápido se pierde la masa muscular o el bajo porcentaje de grasa una vez se deja de entrenar)

Si queremos complicarlo aún más , podríamos fijar nuestra atención también en el aspecto metabólico (interior) además de en el exterior. Por ejemplo podemos fijar nuestra atención en la tolerancia a los carbohidratos y grasas o la facilidad para sacar provecho de la proteína consumida. También pueden tenerse en cuenta factores genéticos (que son relevantes, ya que recientemente se han identificado los genes de la obesidad).

El sistema de clasificación por somatotipos es bastante criticado y muchos dicen que no es útil. Es cierto que puede ser algo demasiado rudimentario para basar el entrenamiento y nutrición completamente en él, pero puede ser una herramienta útil para conocerse a uno mismo.

En otras palabras, si sabes que eres de naturaleza endomorfa, sabes que es lo que va a suceder si no haces nada de cardio y lo que ocurre cuando te saltas la dieta 4 o 5 veces por semana. Tenderás a acumular grasa porque esa es tu tendencia. Si eres ectomorfo, sabes lo que sucede si te saltas comidas o te excedes con el cardio (lo tendrás difícil para ganar músculo).

Extraído y traducido de un artículo de Tom Venuto en: http://www.ironmagazine.com/article501.html